Comer carne de caballo o la historia de la hipofagia

 

Carlos AzcoytiaEl pasado día 15 de octubre de 2013 leí una noticia de la Agencia EFE procedente del Cairo en la que decía que un grupo de jeques y ulemas sirios habían emitido una fetua o edicto islámico por la que permitían a los habitantes de los suburbios del sur de Damasco (Siria) comer perros, gatos y burros con el fin de que la población no muriera de hambre debido a la guerra civil de dicho país y que está propiciada, en gran parte, por occidente en un afán por dominar estratégicamente esa parte de la tierra y sus ricas reservas y que terminará indefectiblemente con un ataque a Irán, toda una vergüenza para aquellos, como yo, que piensan que el capitalismo estuvo siempre desnaturalizado y donde las vidas de las personas sólo representan una cifra estadística, siendo lo importante los beneficios de unos pocos bastardos basado en la desprotección de pueblos enteros.

La fetua dice así: “Hacemos un llamamiento humanitario doloroso a todo el mundo sobre la situación que estamos viviendo en el sur de Damasco. Sigue leyendo

Historia de la dieta de adelgazamiento Atkins

El presente trabajo fue publicado en nuestra revista sobre el año 2005

Carlos AzcoytiaCuando en el año 1.972 el Doctor Robert C. Atkins dio a conocer una dieta de adelgazamiento que se basaba en la ingesta de todo tipo de grasas y proteínas, suprimiendo los carbohidratos, no podía imaginar que desencadenaría una de las más encarnizadas luchas entre científicos expertos en nutrición de la historia. Se produjo una investigación que nada tendría que envidiar a las novelas del inspector Magret o Sherlock Holmes. La razón era muy sencilla y obvia, esa dieta desafiaba la primera ley de la termodinámica y para colmo en ella se ocultaba, eso pensaban, un asesino en potencia que mataría sin duda a todos aquellos que la siguieran.

   En primer lugar deseo recordar que la primera ley de la termodinámica dice básicamente que la energía no puede crearse ni destruirse, sólo se transforma. Por otra parte, una caloría es el equivalente a la cantidad de energía que se necesita para elevar un grado un litro de agua. Sigue leyendo

Historia del pimiento en Gastroradio

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Ya puede oír el primer programa de GASTROHISTORIA de esta segunda temporada que presenta nuestro compañero Carlos Azcoytia, esta vez podrá conocer la misteriosa e inquitante historia del pimiento, no se la pierda.

Para oír el programa presione aquí

Historia del ron, Jamaica y Bryan Higgins

 

Carlos AzcoytiaHablar de la historia del ron es también hacerlo de Jamaica y de cómo un pueblo se encontró, a comienzos del siglo XIX, con tal tipo de miseria que cualquier aventurero podía hacer fortuna gracias al hambre de sus habitantes, pero creo necesario hacer un brevísimo recorrido por su historia para entender no sólo todo el entramado de intereses en la región a finales del siglo XVIII y comienzos del XIX, sino también las consecuencias funestas y las secuelas traumáticas que sufrieron dos islas, la de Santo Domingo y la de Jamaica, que perduran hasta hoy, tras la liberación de los esclavos en la segunda de ellas al no llevarse a efecto de forma escalonada su independencia, y la represión y persecuciones en la primera como consecuencia de las aspiraciones de libertad de los negros que se refugiaban en las montañas y que eran llamados cimarrones.

Por cierto, decir que hoy, según Walk Free Foundation, todavía existen en el planeta cerca de 30 millones de esclavos, para escándalo y vergüenza de todos, de los cuales la mitad están en la India, sin que los llamados países ricos o desarrollados se libren de dicha lacra, ya que en España, por poner un ejemplo, según dichas fuentes, existen entre 5.700 y 6.300 (puesto 147 mundial), independientemente de los cientos de miles de explotados, casi en régimen de semi-esclavitud, con trabajos de miseria o con algo peor, una exclusión social por falta de trabajo que los lleva a perder la dignidad como seres humanos. Sigue leyendo

Historia y fórmula de un vinagre desinfectante, el de los ‘Cuatro ladrones’

 

Carlos AzcoytiaQue el vinagre es desinfectante, al menos eso se cree o se creía, no es ninguna novedad, de hecho se utilizó hasta épocas no muy lejanas en el medio rural español o casi como ‘remedio de la abuela’ en muchos hogares hasta que los productos farmacéuticos estuvieron al alcance de todos, lo que, al menos yo no lo sabía, es que hubo uno específico para tal fin y que encontré en un libro de farmacia, que de seguro estuvo vigente su fórmula hasta entrado el siglo XX y que llamaban ‘el de los cuatro ladrones’ porque según se contaba, copio literalmente: “Este vinagre se llama así, por haberse servido de él, en otro tiempo, cuatro solemnes bribones, con objeto de preservarse de las emanaciones epidémicas de los enfermos, ó cadáveres á quienes robaban”. Sigue leyendo