Historia del restaurante Merguery, un mítico de la historia de la gastronomía francesa

Carlos AzcoytiaDe los restaurantes parisinos míticos existió uno que, por algo que aconteció allí una noche, me dejó en su momento una muy grata impresión y que nada más conocerla me apresuré a escribir, tras hacer las averiguaciones pertinentes de su veracidad.

En los años que han pasado desde que lo publiqué originalmente fue copiado hasta la saciedad, los hubo que tuvieron la delicadeza de hacer la referencia de donde les llegaba la información y otros, la mayoría, lo daban como una investigación propia, sin respetar el trabajo titánico a los que muchas veces se debe de enfrentar un investigador; ellos llegan, roban y se ponen una medalla que, al no tener vergüenza, ni les quema el pecho ni sus conciencias; todos ellos comienzan con una frase más o menos parecida: “Según cuenta la leyenda…”, sin saber que fue algo cierto, porque, como todo lo que hago, me cercioré de corroborar, ya que ni copiar saben y muchas veces ni comprensión lectora tienen. Sigue leyendo

Comer carne de caballo o la historia de la hipofagia

 

Carlos AzcoytiaEl pasado día 15 de octubre de 2013 leí una noticia de la Agencia EFE procedente del Cairo en la que decía que un grupo de jeques y ulemas sirios habían emitido una fetua o edicto islámico por la que permitían a los habitantes de los suburbios del sur de Damasco (Siria) comer perros, gatos y burros con el fin de que la población no muriera de hambre debido a la guerra civil de dicho país y que está propiciada, en gran parte, por occidente en un afán por dominar estratégicamente esa parte de la tierra y sus ricas reservas y que terminará indefectiblemente con un ataque a Irán, toda una vergüenza para aquellos, como yo, que piensan que el capitalismo estuvo siempre desnaturalizado y donde las vidas de las personas sólo representan una cifra estadística, siendo lo importante los beneficios de unos pocos bastardos basado en la desprotección de pueblos enteros.

La fetua dice así: “Hacemos un llamamiento humanitario doloroso a todo el mundo sobre la situación que estamos viviendo en el sur de Damasco. Sigue leyendo

Historia y fórmula de un vinagre desinfectante, el de los ‘Cuatro ladrones’

 

Carlos AzcoytiaQue el vinagre es desinfectante, al menos eso se cree o se creía, no es ninguna novedad, de hecho se utilizó hasta épocas no muy lejanas en el medio rural español o casi como ‘remedio de la abuela’ en muchos hogares hasta que los productos farmacéuticos estuvieron al alcance de todos, lo que, al menos yo no lo sabía, es que hubo uno específico para tal fin y que encontré en un libro de farmacia, que de seguro estuvo vigente su fórmula hasta entrado el siglo XX y que llamaban ‘el de los cuatro ladrones’ porque según se contaba, copio literalmente: “Este vinagre se llama así, por haberse servido de él, en otro tiempo, cuatro solemnes bribones, con objeto de preservarse de las emanaciones epidémicas de los enfermos, ó cadáveres á quienes robaban”. Sigue leyendo

Historia del café en Francia

Carlos AzcoytiaLlegamos al país donde más robos de la historia han existido, se han apropiado de la patata, se han querido repartir el botín con los italianos con el tomate, en el caso que nos ocupa del café y un largo etcétera, que en eso son maestros, que conste que no tengo nada en contra de los franceses ya que me eduqué en la Escuela Francesa, o ¿quizás, por dicho motivo, sí?

Marsella, el gran puerto francés en el Mediterráneo, fue el lugar, como ya hemos visto, donde desembarcaron los primeros granos de café, al menos de forma documentada y por tanto oficial.

En el año 1660 varios comerciantes de Marsella, que habían vivido mucho tiempo en el oriente del Mediterráneo, y por tanto acostumbrados a tomar café, mandaron traer algunos fardos desde Egipto, extendiendo la costumbre de tomarlo a Lion y parte de la Provenza. Sigue leyendo

Crónica de un banquete de Napoleón en Egipto rescatado para la historia

 

Carlos AzcoytiaLa historia está llena de banquetes y comilonas, unas importantes y otros menos, pero todos nos muestran el poder que tenía el que lo organizaba y también los recursos con los que se contaban o la forma de presentar los alimentos.

En el caso que nos ocupa es un hallazgo casual con el que topé cuando buscaba información sobre los sorbetes de café, que serviría para ampliar el monográfico que estoy elaborando sobre la historia del café (ver links a los capítulo que hay publicados hasta hoy al pie de este trabajo) y que rescata para la historia de la gastronomía el que le ofreció a Napoleón, en el Cairo, el jeque Sadat, el 22 de diciembre del año VII francés (1798) con motivo de la fiesta de Segdat-Seimab (mujer santa de la familia de Alí, yerno de Mahoma). Sigue leyendo