Historia del café y los cafés en España

Carlos AzcoytiaQuiero comenzar la historia del café en España haciendo referencia a un libro editado por la Imprenta Real en el año 1796 (ver bibliografía), escrito por el licenciado Antonio Lavedan, cirujano del ejército y de la familia Real española, que puede dar un cambio sustancial en la historia del café en lo referente a su llegada a Europa y demostrar su antigüedad, argumento corroborado por José Vilardebo y Moret un siglo después (ver bibliografía) y que cuenta en la Sección II, capítulo I lo siguiente, copiando casi íntegramente su comienzo: “El uso de la bebida del café está muy introducido en España, y particularmente en los puertos de mar; esta bebida es muy antigua y muy usada en otros reinos y provincias. A esta en Turquía llaman chova, y en toda Europa café. Algunos dicen que es el bunchon de Avicena, quien hace mención de él en el libro 2 trat.2 cap. 42 donde dice Bunchum est res delata Yamen. Otros aseguran que el primero que habló del café fue Zacarías Maomet Razes, el cual vivió en el siglo IX, después de haber nacido nuestro Señor Jesucristo, y que Maomet Razes es el médico que llamamos Rhasis. El Maestro Simón Januense, que fue subdiácono y capellán del Pontífice Nicolao IV en su Opúsculo o Alfabeto habla de este simple, donde dice, que en los libros de Almanzor en el capítulo de los Aromas, describe lo que es el bunchum, que es cierta semilla o simple que traen de Jamen, y que es cálida, y que en arábigo también se llama buncheum. Estas son sus palabras: Sigue leyendo

Historia de los métodos artificiales para criar a los niños en España a finales del siglo XVIII

 

Carlos AzcoytiaLeyendo un libro editado en 1795, cuyo autor fue Josef Iberti, Médico de Cámara Honorario de la Casa Real, e impreso en Madrid por la Imprenta Real, creí necesario para cerrar el monográfico dedicado a la alimentación infantil, al pie de este escrito podrá ir a otros trabajos relacionados, comentar dicho libro y así tener una visión amplia de las gracias y desgracias por las que tuvieron que pasar nuestros antepasados desde su más tierna infancia, porque soy de la opinión que no todo tiempo pasado fue mejor.

Si resulta interesante este libro es por la forma como Iberti aborda y desarrolla la alimentación infantil, algo que me dejó bastante sorprendido y que podrá comprobar si sigue leyendo el presente trabajo.

En primer lugar aconseja que si una madre no puede dar el pecho a su hijo, por las circunstancias que fueren, debe de recurrir, antes de hacerlo a un ama de cría escogida sin mucho examen, a alimentos artificiales, ya que vio, en sus viajes por Europa, como en Inglaterra lo hacían así, sin especificar los componentes que se utilizaban, por el contrario en Italia contaba que lo hacían con leche de cabra y ovejas en sus dos primeros meses, para después pasar a darles una papilla muy desleída de pan bien fermentado y hervido en agua con manteca de vaca, aceite o caldo de carne por cinco o seis meses hasta que podían ir comiendo otras cosas. Sigue leyendo

Historia de una salazón y conservación de carnes que perdura hasta hoy y descubierta en 1797

 

Carlos AzcoytiaUno de los problemas que siempre se le presentó a la humanidad fue el de la conservación de los alimentos, algo que hemos estudiado en múltiples trabajos en nuestro sitio, siendo el método más empleado el de salazonar, el más universalmente empleado en todo el orbe, ya que el cloruro sódico tiene la cualidad de absorber la humedad y con ello evitar el desarrollo de hongos y bacterias que favorecen o son motivo de la putrefacción.

Cayó en mis manos una publicación de finales del siglo XVIII, muy interesante como veremos a continuación, en la que se trataba el tema que nos ocupa y que tenía la particularidad de utilizar un nuevo método que ha llegado hasta nuestros días, me refiero a la utilización de un conservante, hoy conocido como E251, con el que se pretendía que las carnes no estuvieran tan saladas, siendo esta la primera referencia que he encontrado de su empleo. Sigue leyendo

Historia del café en Francia

Carlos AzcoytiaLlegamos al país donde más robos de la historia han existido, se han apropiado de la patata, se han querido repartir el botín con los italianos con el tomate, en el caso que nos ocupa del café y un largo etcétera, que en eso son maestros, que conste que no tengo nada en contra de los franceses ya que me eduqué en la Escuela Francesa, o ¿quizás, por dicho motivo, sí?

Marsella, el gran puerto francés en el Mediterráneo, fue el lugar, como ya hemos visto, donde desembarcaron los primeros granos de café, al menos de forma documentada y por tanto oficial.

En el año 1660 varios comerciantes de Marsella, que habían vivido mucho tiempo en el oriente del Mediterráneo, y por tanto acostumbrados a tomar café, mandaron traer algunos fardos desde Egipto, extendiendo la costumbre de tomarlo a Lion y parte de la Provenza. Sigue leyendo

Historia del café en Holanda

Carlos AzcoytiaComo en los capítulos anteriores comenzamos con un cuento o leyenda, que lo mismo nos da el nombre, donde contaban como en Arabia no dejaban salir las semillas del café si no estaba torrefactado o tostado, para de esta forma tener el monopolio de su venta, algo que según estamos viendo no encaja demasiado bien en el puzle de la historia del café. Sea como fuere, y ante la imposibilidad de vigilar a todos los peregrinos que viajaban a la Meca, un avispado, de nombre Baba Budan, a principios del siglo XV, pudo sacar las semillas y se cuenta que las plantó en las montañas de Mysore, en un poblado llamado Chik-Maglur en la India.

Hasta aquí lo que considero cuento o ficción, que enlaza ya con la historia, porque la gente, sólo algunos, cuentan muy bien las mentiras y saben novelar la historia. Sigue leyendo