Este estudio es una actualización de otro anterior al año 2004
Una serie de hechos ocurridos tras la guerra civil española, en concreto entre los años 1941 y 1944, siempre crearon en mi un interés especial porque se mezclan en estos casos la intriga de una novela policíaca y un estudio pormenorizado de la toxicidad de un alimento que si se toma en exceso y como principal nutriente puede causar la parálisis y la muerte.
Todo comienzó cuando los doctores Ley y Oliveras de la Riva hacen una publicación en la revista ‘Clínica Española’ en el año 1941 en el que dan la noticia de una enfermedad misteriosa que había desarrollado un enfermo que estaban tratando y que presentó, en un principio, un cuadro clínico que se caracterizaba por un repetido calambre en las pantorrillas, a los siete días repentinamente, al andar, observó que no podía hacerlo sin arrastrar la punta de los pies pese a que el paciente, aparentemente sano, no contaba más de 27 años. Al mes no podía contener la orina, la dificultad para andar era tan evidente que arrastraba la planta de los pies y un creciente temblor en las manos le hacía imposible sostener los cubiertos y afeitarse. Sigue leyendo